cómo ayudar a una empresa

¿Cómo ayudar a una empresa si eres el auditor?

 El mundo empresarial está creciendo de forma vertiginosa, la profesión contable debe adaptarse día a día a estos cambios, por lo tanto, los auditores estamos llamados a innovar en nuestras labores.

En un entorno económico-financiero cada vez más complejo, es fundamental mirar hacia adelante y prever oportunidades, es por ello que, en este escrito, abordaremos las diferentes posibilidades que tenemos para aportar al crecimiento económico y social de nuestros clientes bajo la figura de auditor y/o revisor fiscal.

En los últimos diez años, Colombia ha experimentado diversos cambios en la profesión contable, influenciados en su mayoría por las condiciones económicas mundiales. Estas modificaciones incluyen la adopción de Normas Internacionales de Información Financiera – NIIF y la adopción de las Normas de Aseguramiento de la Información –NAI lo que ha impulsado a los profesionales de la contaduría a rebasar sus límites personales y profesionales.

En ese orden de ideas, el ejercicio de la auditoría no se ha quedado atrás y podemos decir que esta área de la profesión contable es la que más se ha visto afectada, ya que ha exigido un mayor compromiso y versatilidad a la hora de aplicar nuestro criterio profesional. 

¿Pero a qué se dedica exactamente un auditor? Normalmente nos centramos en el área administrativa, legal, financiera, fiscal y contable. Nuestra visión es transversal e integral, de hecho, como manejamos información confidencial y de sumo interés, debemos ceñirnos en todo momento, a códigos de ética y de conducta.

Como ya lo hemos mencionado, hoy por hoy debemos aplicar una serie de normatividad internacional al momento de ejercer como auditores, estos estándares internacionales de auditoría y aseguramiento han sido compilados en el Handbook 2013 del IFAC, el cual menciona que corresponden a un sistema o conjunto amplio de normas que incluye:

  • El Código de Ética
  • Estándares internacionales de control de calidad (ISQC)
  • Los estándares internacionales de Auditoría (ISA)
  • Declaraciones internacionales sobre la práctica de la auditoría (IAPS)
  • Estándares internacionales de compromisos de revisión de información financiera histórica (ISRE)
  • Estándares internacionales de compromisos de aseguramiento diferente de información financiera histórica (ISAE)
  • Estándares internacionales sobre servicios relacionados (ISRS)

Es importante aclarar que, en la actualidad, la auditoría no solo se basa en identificar las áreas críticas de una compañía, o señalar los errores de los procesos administrativos, financieros o productivos, el enfoque de la auditoría moderna va más allá, es entender que cada organización y cada cliente es diferente e indudablemente, la aplicación de los estándares internacionales es de vital importancia para generar una confianza en la información financiera de las compañías.

Podemos concluir que el rol del auditor ha cobrado gran importancia a nivel mundial, aportando un grado de seguridad sobre los datos financieros de cada una de las empresas en diferentes mercados, por esta razón, a continuación, enunciaremos una serie de cualidades adicionales con las que deben contar los auditores modernos, para lograr ayudar a las compañías que contratan sus servicios:

  1. Trabajo en equipo: Es esencial aprender a trabajar en equipo, con nuestros compañeros y con los colaboradores del cliente. Esta característica no se debe confundir con la familiaridad o confianza con el cliente, dado que se deben implementar límites claros entre las partes para mantener la independencia que nos caracteriza.

Existen dos enfoques de trabajo en equipo:

  • El que desarrollamos con nuestros compañeros: En este sentido, se trata de aprovechar al máximo la diversidad de pensamiento y habilidades que cada compañero nos puede aportar, dado que no es un secreto que existen demasiadas funciones que los auditores debemos desarrollar, por lo cual, es fundamental contar con un equipo de trabajo multidisciplinario, que incorpore profesionales del área legal, tecnológico, tributario y financiero.
  • El que desarrollado con colaboradores del cliente: este trabajo en equipo está enfocado a maximizar los tiempos y procesos de las operaciones permanentes, como son la revisión de impuestos, elaboración de certificaciones y obtención de información necesaria para nuestras labores.

¿En qué aporta el trabajo en equipo para ayudar a nuestro cliente?

Básicamente permite maximizar los tiempos en la ejecución de nuestras labores, lo cual repercute en un mayor análisis y mejor interpretación de la información. Al contar con un equipo multidisciplinario y especializado, se cuenta con mayor campo de acción, lo que permite blindar al cliente de riesgos en diversas áreas.

El poder hacer equipo con sus colaboradores, nos permite disminuir reprocesos y evitar posibles tropiezos con entes de vigilancia y control, así como demás usuarios de la información financiera de la compañía.

  1. Disposición y disponibilidad total a los stakeholders de los clientes: Para lograr dar valor agregado a nuestros clientes, es indispensable tener una disposición y disponibilidad adecuada.

Entendiendo que un stakeholders es cualquier individuo o grupo de individuos que puede afectar o ser afectado por el logro de los objetivos de una organización, entre los cuales están, accionistas, empleados, clientes y proveedores.

Hablamos de tener disposición a los stakeholders, cuando nuestra actitud frente a sus requerimientos o necesidades es siempre de apoyo o ayuda, de aportar nuestro conocimiento y experiencia en beneficio de la compañía.

Por otro lado, la disponibilidad hace referencia a la capacidad de estar presente para brindar una ayuda cuando se lo necesita.

En auditoría, estas dos características son fundamentales para dar apoyo a nuestros clientes, sin embargo, existe una línea muy delgada que no se le permite traspasar al cliente, dado que nuevamente debemos enfocarnos en nuestra independencia y objetividad.

Es claro que siendo auditores podemos ayudar, estamos en la capacidad de aportar nuestro conocimiento, indicando al cliente las mejores rutas para solucionar sus inconvenientes, no obstante, es la compañía quien decide que opción tomar.

  1. Transparencia y compromiso: Las características y roles fundamentales del auditor continuarán girando en torno al escepticismo profesional – independiente y objetivo – y al buen juicio, no obstante, puede comprometerse con sus clientes.

Transparencia y compromiso: Estas características se encuentran muy ligadas en el ejercicio de la auditoría, ya que a través de ellas se crea una confianza con el cliente y los diferentes terceros, hacia nuestra labor.

Cuando mencionamos el compromiso, se tiende a confundir con familiaridad hacia el cliente y una afectación a nuestra independencia – que es una actitud mental que los auditores despliegan a través del escepticismo profesional-, pero esto se encuentra alejado de la realidad, cuando nos comprometemos con el cliente, estamos enfocados a ayudar a mejorar sus resultados, exigiendo cumplimiento de todas sus obligaciones normativas, legales, tributarias, entre otras. Así mismo, brindamos alternativas y opciones de mejora continua.

Al actuar con transparencia y al comprometernos con nuestros clientes, ayudamos a fortalecer su capacidad de reacción frente a las diversas dificultades que se puedan presentar.

  1. Comunicación asertiva: Como hemos mencionado, cada cliente es un mundo diferente y hablar su lenguaje nos permitirá ayudar a su crecimiento.

Una de las grandes dificultades que afrontamos los auditores, es que el cliente y sus stakeholders entiendan nuestros hallazgos y recomendaciones, en gran medida, esta situación se presenta porque no hablamos el mismo idioma del cliente, nos enfocamos en cumplir con nuestras listas de chequeo y olvidamos lo importante que es detallar o traducir nuestras preocupaciones. Es algo parecido a lo que nos sucede cuando vamos al médico, si el profesional de la salud nos habla en sus términos técnicos no vamos a captar la información que nos quiere transmitir, caso contrario, cuando éste nos habla de forma común y nos traduce nuestro diagnóstico, es mucho más fácil interpretar nuestras dolencias y tomar acciones correctivas que nos permita mejorar nuestra salud.

Por esta razón, es imperativo que los auditores realicemos un adecuado conocimiento del cliente, de sus operaciones y de su cultura empresarial, para lograr transmitir de forma adecuada nuestras recomendaciones u oportunidades de mejora.

Por: Jenny Rojas – Senior de Auditoría.

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